Ejercicios compuestos y ejercicios de aislamiento

Ejercicios compuestos

Si quieres conseguir buenos resultados en el mundo del fitness y la musculación, debes conocer cuáles son los ejercicios compuestos y los ejercicios de aislamiento para poder sacarle el mayor partido a tus entrenamientos.

Mucha gente cree que entrenar con pesas consiste simplemente en llegar al gimnasio y empezar a levantar kilos como si no hubiera un mañana, pero, lo cierto es que es algo mucho más complejo que eso.

Hay ciertos tipos de ejercicios que ofrecen mejores resultados que otros y es más conveniente realizarlos según los objetivos marcados de cada persona, por eso en este artículo vamos a mostrarte cuáles son para que puedas ponerlos en práctica.

Ejercicios compuestos

Los ejercicios compuestos son aquellos en los que intervienen varios grupos musculares en un mismo ejercicio, siendo un buen ejemplo las sentadillas.

Las sentadillas trabajan prácticamente todo el tren inferior al mismo tiempo, desde los cuádriceps, isquiotibiales, glúteos, etc.

Otros buenos ejemplos de ejercicios compuestos son las dominadas, los fondos en paralelas, el press militar, el peso muerto, las zancadas, el press banca, las flexiones, etc.

Viendo los ejemplos de los ejercicios, seguro que se entiende qué tipo de ejercicios son.

Este tipo de ejercicios son los más recomendados a la hora de conseguir cualquier objetivo, básicamente porque trabajan varios músculos al mismo tiempo y eso tiene algunas ventajas, como por ejemplo una mejor optimización del tiempo de entrenamiento.

Otros beneficios de los ejercicios compuestos son los siguientes:
  • Ayudan a ganar masa muscular, fuerza y resistencia muscular
  • Generan un entorno anabólico en el cuerpo
  • Aumentan el metabolismo
  • Aceleran la combustión de las grasas
  • Ayudan a perder peso
  • Mejoran la coordinación
  • Permiten entrenamientos más cortos e intensos

Ejercicios de aislamiento

Por otro lado, tenemos los ejercicios de aislamiento, que se diferencian de los compuestos porque estos trabajan tan solo un músculo durante la ejecución del ejercicio, de ahí su nombre, porque ayudan a aislar el músculo trabajado.

Este tipo de ejercicios se utilizan en procesos de rehabilitación, para corregir desequilibrios musculares o para añadir intensidad a músculos atrasados del resto.

También ayudan a conseguir un mayor flujo de sangre hacia los músculos con su consiguiente congestión muscular, lo que también puede generar mayores ganancias musculares.

Estos son algunos ejemplos de ejercicios de aislamiento:
  • Extensión de tríceps en polea
  • Curl de bíceps
  • Elevación lateral con mancuerna
  • Elevación frontal con barra
  • Extensión de cuádriceps
Pese a que los más recomendado es basar un entrenamiento en los ejercicios compuestos, lo ideal sería combinar ambos tipos de ejercicios para aprovechar los beneficios de ambos y conseguir así mejores resultados que nos acerquen un poco más a nuestros objetivos.

Siempre es mejor empezar un entrenamiento con los compuestos para aprovechar mejor la fuerza y, para terminar el entrenamiento se pueden añadir uno o dos ejercicios de aislamiento para acabar de agotar el músculo y hacer que les llegue más sangre y oxígeno a los tejidos, lo que también acelerará la recuperación muscular después de un entrenamiento.

Por lo tanto, a modo resumen diré que lo mejor es centrarse en los ejercicios compuestos y terminar tu entrenamiento con uno o dos ejercicios de aislamiento, así optimizarás mucho más tus entrenamientos y conseguirás mejores resultados en cuanto a ganancias musculares y fuerza.

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